Sunday 29 July 2018

SOLO LOS TRES POR AHORA: 8 Consejos Para Sobrevivir la Infertilidad en una Iglesia Centrada en la Familia

Cuando teníamos solo una hija, una de las cosas que más me gustaba de ir a la reunión sacramental de nuestra iglesia, era ver a todas las familias venir a tomar sus lugares en los diferentes bancos. Eran de todas las formas, edades, tamaños, y dependiendo en el barrio, eran de diferentes grupos étnicos. Sin embargo, por lo general, las familias que aún tenían hijos en casa tenían más de un hijo. Usualmente de este grupo, si solo tenian un hijo, había otro en el camino (o al menos otro planeado).

Durante más de siete años de reuniones dominicales, asistencia a actividades o eventos de la iglesia, nos sentimos aislados porque solo teníamos una hija. Algunos nos miraron con curiosidad y pudimos sentir que estaban tratando de descubrir por qué no teníamos más hijos. En las clases, otros hacían comentarios diciendo que habian algunos "entre nosotros" que decidieron no tener más de un hijo. Sabíamos que se estaban refiriendo a nosotros y, aunque estábamos seguros de que no era con intención de ofender o hacer daño, todavía sentíamos tristeza y, en ocasiones, amargura por haber sido juzgados por algo sobre lo que no teníamos control. Aunque el aislamiento que sentimos disminuyó nuestro deseo de asistir la iglesia, perseveramos y seguimos asistiendo a nuestras reuniones con regularidad y sirviendo en nuestros llamamientos fielmente. No permitimos que los comentarios insensibles de algunas personas, determinara cómo interactuamos con la familia de la iglesia. Afortunadamente, esta prueba nos acercó más como pareja y nos hizo conscientes diariamente de la presencia de nuestro Padre Celestial en nuestras vidas y de su amor por nosotros.

Con el tiempo, decidimos compartir con la congregación a la que asistíamos, nuestra lucha con la infertilidad secundaria inexplicada. Esto ocurre cuando una pareja perfectamente sana que ha tenido un hijo (o más hijos) sin el uso de la ayuda reproductiva, es incapaz de concebir; o, si la esposa queda embarazada, no puede mantener el embarazo. Nos dijeron que no había una explicación médica para nuestro tipo de infertilidad. Cuando estábamos pasando por esta experiencia y compartíamos nuestra lucha, debido a la falta de conciencia y conocimiento y al hecho de que teníamos una hermosa niña gregaria, a menudo no nos creían. Nuevamente las bromas comenzaban. A veces, algunos miembros con buenas intenciones nos decian: "Al menos tienes a tu hija" o "Deberías estar agradecida de que tengas al menos un hijo, tal y tal persona no tiene ninguno". Como si mi anhelo o dolor fuera menor. Sin embargo, sabía lo que era tener vida creciendo dentro de mí. Sabía lo que era sentir cómo mi cuerpo se adaptaba y cambiaba y se convertía en un hogar acogedor para uno de los hijos de nuestro Padre Celestial. Había sentido la grandeza de ver a una pequeña persona recién llegada del Cielo que dependía exclusivamente de mí para todo. La sensación de ser necesitada y ser la única cosa en el mundo por quien este niño(a) no podría vivir, me llenaba de humildad y fue muy sagrado para mí. Era como si hubiera probado una fruta deliciosa y supiera lo maravilloso que era y luego solo podía mirar mientras otros lo disfrutaban. Es decir, mientras otros criaban y agrandaban a sus familias, mi esposo, hija y yo solo podíamos desear que la nuestra creciera.


En una congregación a la que asistimos, una vez pregunté si podía organizar un grupo de apoyo de infertilidad para las hermanas. Pensé que reunirme con otras mujeres que actualmente tenían problemas con infertilidad o que habían luchado anteriormente con esta prueba me ayudaría a no sentirme tan sola y aislada. La presidenta de mi grupo de mujeres apoyó esa idea. Se convirtio en un contacto para que yo conociera otras hermanas que habian pasado por la prueba de la infertilidad o lo estaban pasando. Tambien se conviertio en mi mentora y en una amiga maravillosa. Sin embargo, no todas mis líderes estaban abiertas a considerar mis sujerencias. Me di cuenta lo que una madre joven que se desempeñaba como líder había respondido al decir que crear un grupo de "lloronas" o "mujeres que lloran" no sería una buena idea. La falta de comprensión y empatía solo aumentó mi dolor y mi aislamiento.

Aunque no creé el grupo, me uní a algunos grupos de apoyo en línea y me sumergí en mis escrituras y en las oportunidades de servicio. Me esforcé por crear un pedacito de cielo en el hogar y en las circunstancias que se me habían dado. También trabajé muy duro para buscar cosas por que agradecer en mi vida. Hice todo lo posible para ser lo que Dios quería que fuera. Hay algunas maneras en que siento que me las arreglé bien y otras formas en las que no creo haberlo hecho. Hay cosas que deseé haber sabido o tenido el valor de hacer. Si pudiera enviar un mensaje a mi misma en el pasado, o a cualquier persona que pueda estar experimentando actualmente este tipo de desafío, sería decir:

Sé tu propio defensor  
Si crees que hay algo que te ayudará a sobrellevar esta prueba, habla con tu familia, colegas, líderes, médicos y solicita apoyo si es necesario. Incluye personas en tu red con las que te sientes cómodo y que tengan un grado saludable de inteligencia emocional. No te desanimes si tus solicitudes o ideas sobre cómo otros pueden ser útiles recae en oídos apáticos. Sigue defendiéndote a ti misma hasta que obtengas la ayuda que necesitas. Por medio de la oración y inspiración personal, permita que otros que hayan experimentado lo que estás pasando entren en tu vida. Ten una persona segura que pueda estar a tu lado en la iglesia cuando estas teniendo un mal dia. A veces puede ser tu companera ministrante o una hermana quien es tu maestra ministradora, o casi cualquier persona en quien confíes que comprenda la empatía. NO tienes que sufrir en silencio y sola.

Por medio de la inspiración que viene al orar, aprovecha oportunidades de servicio
Tener solo un hijo significa que a veces puedes tener más tiempo y recursos que otra persona. No permitas que la tristeza, los celos o los sentimientos de insuficiencia hagan que rechaces las oportunidades de ayudar a alguien que parece quedar embarazada fácilmente. Considera aceptar oportunidades para "ser madre" del hijo de otra persona, incluso si duele cuando debes devolverlo. Habiendo dicho eso, solo tu sabrás si tienes suficiente fortaleza emocional para servir en situaciones que te coloquen con niños. Comparte tus sentimientos con tus líderes para que puedan ser cuidadosos y concienzudos con respecto a los tipos de llamamientos o tareas que se te pueden brindar. También es una buena idea dejar que los líderes sepan cuánto de tu lucha (si algo de ella) estás dispuesta que sea compartido en un consejo de barrio, por ejemplo.

Se flexible
 
Vivir con la infertilidad puede ser una montaña rusa para ambos cónyuges. A veces puedes desear participar en fiestas de beinvenida para bebes e incluso planificarlos, mientras que otras veces puedes sentir que participar en la alegría de otra persona será demasiado doloroso. Se amable contigo misma. No te juzgues ni te rindas a las conversaciones internas negativas porque no estás preparado para socializar en el una fiesta de bebe de otra mujer. Aprende a reconocer los factores desencadenantes que hacen que ingreses en un ciclo negativo. Crea una lista de cosas que te den alegría y satisfacción para que cuando te encuentres en una espiral descendente en tu salud emocional, tengas opciones saludables ya establecidas. Si tienes una recomendación para el templo, VE AL TEMPLO. Incluso si no la tienes, pero vives cerca de un templo, ve a los terrenos del templo y busca al Señor a tu manera. El templo les proporcionará a ti y a su esposo un refugio de tus dificultades y la asistencia regular y sincera les traerá la paz. Dependiendo cual es tu fe, sigue tu corazon a lugares sagrados y que te ayudan a sentirte mas cerca de Dios.

Manten tu dedo en el pulso de tu matrimonio  
La jornada con infertilidad de cualquier tipo es desgarrador, estresante y agotador. Asegúrate de que tu y tu pareja siguen de acuerdo con sus metas de a corto y largo plazo. Un esposo puede sentirse especialmente indefenso al ver a su esposa someterse a procedimientos invasivos o experimentar pérdida. Puede ser devastador para él sentir que no puede quitarte tu dolor. Recuerda, él también ha sufrido pérdidas y añora a un niño o más niños. Si es necesario, busca asistencia profesional externa para ayudarles a lidiar con todas las tensiones que este tipo de desafío trae a un matrimonio.

• Tómese tiempo el uno para el otro que no involucre nada que ver con la planificación familiar.
• Séan muy cuidadoso en cuanto a honrar sus convenios y mostrar  amor tanto en palabras y en hechos/acciones.
• Mantengan las líneas de comunicación impecablemente claras.

Deja que el (los) hijo(a) (s) que tienes sepan que son suficientes  
Recuerde que tu (s) hijo(a) (s) verán tu sufrimiento y por mucho que intentes ocultarlo, sabrán que algo ha sucedido. Comparte tu prueba con ellos de una manera apropiada para su edad. Comprende que pueden tener inquietudes o deseos de que tengan miedo de hablar. Sé su lugar seguro y hazles saber que son amados sin medida, independientemente de que si tienen hermanos o no. Prepáralos para los comentarios insensitivos jugando en roles con ellos antes de las reuniones con otras familias o amigos. En una ocasion visitando a uno de mis hermanos, nuestra hija estaba felizmente jugando con un primito bebe. Al ver esto, la hermana mayor de su primito vino y le dijo: "Gigi, este es NUESTRO bebe" y la empujo del puesto y empezo a jugar con su hermanito. Pude ver la tristesa en los ojos de mi bella hija. Al irnos intentamos calmar su corazon al crear diferentes respuestas chistosas que podia elegir responder en otra situacion similar. Nunca mas salimos a alguna actividad o convivio con familia o amigos, sin primero preparar a nuestra hija para escuchar comentarios insensibles. 
Encuentra la manera para que experimenten relaciones de tipo hermano con amigos o vecinos. Yo hice esto por mi hija mayor al cuidar a un niño más pequeño en mi casa y al cuidar de las hijas de una prima tambien.

Edúcate a ti mismo y a los demás sobre la pena  
El dolor de la pena es una emoción compleja y, a veces, malentendida. Puedes tener dificultades duraderas si no completas tu círculo de pena. La pérdida que experimentas puede ser abrumadora y debes estar atenta para que no te consuma. Asegúrate de que tanto tu como tu esposo comprendan el dolor de la pena y su efecto en las emociones y acciones de uno. Algunas personas que sufren la pena, pueden actuar en forma peligrosa o tener lapsos en buen juicio. Asegúrate de buscar ayuda temprano si sientes que la pérdida que estás experimentando o que has experimentado comienza a afectar tu capacidad para hacer frente a la vida cotidiana. Comparte tu conocimiento del dolor con aquellos en tu círculo de influencia. También pueden estar afligidos y juntos podrán soportar sus cargas con más facilidad. Al buscar consejos tanto médicos como espirituales y comprender que habrá una combinación de cosas que te ayudarán, con el tiempo puedes sanar.  

• Para nosotros, ver a un consejera de dolor de pena nos permitió expresar lo que estábamos pasando y explicar todos los sentimientos tóxicos. Con su ayuda, trabajamos en "The Grief Recovery Handbook", que tenía un programa con consejos prácticos y ejercicios. Ver a un especialista y buscar consuelo y fuerza en Nuestro Padre Celestial nos ayudo a pasar del dolor y la oscuridad a la alegría y la luz. (Nombre completo del libro al final)

Ignorar los juicios

A veces los miembros de la iglesia asocian las bendiciones con la dignidad. Cuando me dijeron que necesitaba aumentar mi dignidad para que nuestro Padre Celestial me bendijera con otro hijo, traté de encontrar maneras de aumentar mi nivel de discipulado. Aunque, también sentí que era más bajo que el polvo. Pensé que tal vez estaba destinada a sentirme perennemente menos valiosa que aquellos que tenían el tipo de familia que yo anhelaba. Mantuve una recomendación para el templo, seguí los consejos del profeta, serví fielmente en mis llamamientos y en mi familia y comunidad, compartí el Evangelio con mis amigos y mi familia e hice todo lo posible por hacer lo correcto. Pero durante un tiempo en mi viaje con infertilidad, permití que alguien me hiciera creer que porque era estéril y después no podía mantener mis embarazos viables, era indigna. Lamentablemente, algunos familiares afirmaron que la incapacidad de mi cuerpo para llevar un embarazo a término fue el castigo de Dios. Estaban ellos tan equivocados.
Muchas personas hicieron comentarios inútiles, inexactos e insensibles. Si alguien intenta venderte falsedades, ¡ignóralo!

Imprimí mis citas favoritas y las coloqué donde las vería a diario. Una fue la siguiente de Orson F. Whitney:
"Ningun dolor que suframos, ninguna prueba que experimentemos se desperdicia. Se dedica a nuestra educación, al desarrollo de cualidades como la paciencia, la fe, la fortaleza y la humildad. Todo lo que sufrimos y todo lo que soportamos, especialmente cuando lo soportamos pacientemente, edifica nuestros caracteres, purifica nuestros corazones, expande nuestras almas y nos hace más tiernos y caritativos, más dignos de ser llamados hijos de Dios ... y es a través de la tristeza y el sufrimiento, el trabajo duro y la tribulación, que obtenemos la educación que venimos aquí a adquirir ".
(¡ME ENCANTÓ ESTA CITA! Me ha servido en muchas etapas dificiles en mi vida. He incluido un discurso en un devocional dado por Larry Richman sobre el tema de la adversidad. Vea el primer enlace a continuación)

Recordándome que mi relación más importante era la que tenía con mi Padre Celestial y que lo que Él pensaba de mí era lo que realmente importaba, me permitío soportar mis pruebas con fe.

Encuentra tu segundo mejor deseo  

Cuando no podía quedar embarazada por ningún método y mi niña de sol empezo días enteros en la escuela, me senti muy sola. Me volví muy egoista. Para combatir mis sentimientos de incompetencia, amargura y soledad, y después de muchas oraciones e innumerables ayunos, me senti inspirada a encontrar un empleo fuera de mi hogar. Fui bendecida con un trabajo que fue satisfactorio y desafiante. Encontré trabajo en uno de los campos que había estudiado y pude viajar a comunidades indígenas rurales en el área donde vivía. Hice amistades duraderas con gente maravillosa allí. Pude seguir con mi aprendizaje, ayudar al gobierno local por el cual trabaje desarollar politicas de inclusion de la diversidad, y pude trabajar con varias personas talentosas.  Supe entonces que mi trabajo era una bendición de compensación porque mi bendición más deseada de tener más hijos fue retenida por un tiempo. Algunas palabras sabias que me dieron fuerza vinieron en forma de una charla dada por Joseph B. Wirthlin. Él compartió lo que él llamó, El Principio de Compensación y dio este consejo inspirado:

"Lo tercero que podemos hacer es comprender el principio de la compensación. El Señor compensa a los fieles por cada pérdida. Lo que se quita a los que aman al Señor se les agregará a su manera. Aunque puede que no venga a en el momento en que lo deseemos, los fieles sabrán que cada lágrima de hoy eventualmente se devolverá cien veces con lágrimas de regocijo y gratitud (ver el segundo enlace a continuación)

Después de 2 años de mi segundo mejor deseo, varios procedimientos invasivos y dolorosos, 2 abortos desgarradores y una prueba devastadora de mi fe, ese primer deseo, mi mayor deseo fue otorgado. Sé que las bendiciones que obtuve después de superar los días más oscuros de mi vida, son un resultado directo de la comprensión verdadera de la expiación de Cristo, la obediencia sincera a los mandamientos y el dejar que Dios decidiera la hora en que nuestra familia creceria. Finalmente, habia dejado mis penas en sus manos.
. Concebí y llevé a término a dos niñas preciosas. Fue una bendición de un Padre Celestial misericordioso y amoroso que yo aprecio todos los días y nunca he dado por sentado. Pero, había estado dispuesta a vivir mi segundo mejor deseo si esa era la voluntad de mi Padre Celestial. Entiendo que no todos los que experimentamos infertilidad o lo hemos experimentado en el pasado tenemos un resultado feliz. No sé por qué se nos retuvo la posibilidad de tener más hijos durante tanto tiempo. No siempre entiendo por qué tenemos que enfrentar las pruebas que hacemos, pero sé que cuando las enfrentamos con Dios de nuestro lado, volviéndonos hacia Él en lugar de alejarnos de Él, podemos vencer. Podemos triunfar. Nuestros fracasos pueden convertirse en fortalezas y éxitos.
Conclusión

Sé que cada uno de nosotros tiene su propio camino para caminar y que es posible que las bendiciones retenidas no todas se nos pueden dar en esta vida. Dios aplica el principio de compensación en nuestras vidas y debemos tener la valentia de confiar en él. Podemos dejar nuestras cargas en sus manos, sean lo que sean. Sé que es más fácil decirlo que hacerlo, ya he estado allí antes. Pero, es posible.


"The Grief Recovery Handbook, The Action Program for Moving More Death, Divorce, and Other Losses, including Health, Career, and Faith", por John W. James y Russell Friedman.

Aprendiendo a través de los ensayos de la vida, Larry Richman https://www.lds.org/ensign/2010/03/learning-through-lifes-trials?lang=eng  

Ven lo que pueda y lo ame, Joseph B.Wirthlin                              https://www.lds.org/general-conference/2008/10/come-what-may-and-love-it?lang=eng


Cuando solo eramos tres.
Little Qualicum Falls-Vancouver Island, British Columbia

Nuestra familia actualmente, Julio 2018.
Sacsauhuayaman-Cusco, Peru


1 comment:

  1. Me senti muy identificada con la historia. En casa solo fuimos tres ( soy hija unica) y luego solo dos. Fue muy triste crecer con la carencia y el dolor q mamá sentia. Aun ahora q me case y tengo cuatro hijos siento q hay cosas q nunca aprendi. Me gusto saber q mamá recibira las bendiciones retenidas, ella era tan buena. Merece ser feliz. Gracias por compartir sus experiencias

    ReplyDelete